miércoles, 19 de diciembre de 2007

Las aventuras de los dinosaurios 2


Después de que cada dinosaurio tomó su camino, los hermanos dinosaurios fueron hasta su casa, sus padres no estaban y su refugio estaba roto. Ellos conocían a un ``pterodáctilo´´ así que fueron en busca de él. Después de un día se encontraron con muchos pterodáctilos, hasta que uno de ellos los reconoció y preguntó - ¿Qué hacen ustedes aquí? Los dinosaurios le respondieron – Queremos que nos ayudes a encontrar a nuestros padres. Así que el terodáctilo voló hasta el cielo y vio que estaban secuestrados por cinco dímetrodónes, él amigo de los dinosaurios les dijo - ¡Ya tiraron a los padres de los dinosaurios! Pero un Brachosaurio, muy viejo, con su largo cuello los rescató. Después, entre todos fueron a la cima de la montaña y vencieron a los dimetrodónes. Arreglaron su refugio y vivieron felices para siempre.

Autor: Axel

El puerquito





Hace mucho tiempo en un lejano pueblo de Campana vivía una señora que tenia un puerco y una puerca y de ellos salió un puerquito y ese puerquito se había perdido en el bosque con un cazador. El cazador era muy buenito y se lo llevo en la camioneta hacía su cabaña. A la noche lo dejo dormir con su osito de peluche. Al otro día lo llevó a la granja y lo crío muy bien y le dijo: conmigo vas a crecer sano y fuerte. El papá y la mamá del puerquito estaban preocupados por que él no había aparecido. Decidieron salir a buscarlo y de repente el puerquito los ve pasar y les grita - ¡mamá papá! Y por fin se volvieron a juntar y vivieron felices por siempre.

Autores: Rocío y Sonia
Ilustración: Lucas

La primera cita


Hace mucho pero mucho tiempo, en un lejano pueblo de Oriente, vivía en una casita chiquita, una bruja malvada. Ella tenía acorralada a una princesa porque le tenía envidia. La princesa gritaba – auxilio, socorro, que alguien me ayude por favor. Un príncipe la escuchó y fue a salvarla. Él le tiró a la bruja la olla con agua caliente y la pócima y la bruja desapareció y nunca más volvió. El príncipe rescató a la princesa y le preguntó - ¿querés tener tu primera cita? Y así se enamoraron y vivieron felices para siempre.

Autora: Johana

Nunca es tarde darse cuenta...

Había una vez un nene llamado Pedro que siempre estaba triste porque su mamá no le compraba caramelos.
Pedro una vez fue a la escuela y la maestra les dijo a todo el grado que si querían contar algo de su vida que los ponía triste, el nene puso atención a las historias de sus compañeros y se dio cuenta que estaba mal, poniéndose él mal por una golosina, cuando a sus compañeros les faltaba: a uno la mamá, a otro el papá, algunos los papás no tenían trabajo y otros que trabajaban todo el día y no estaban con ellos. Entonces Pedro se dio cuenta que él se ponía triste por algo sin sentido y cuando le toco el turno de contar, se puso muy triste, pero, muy triste porque no podía decir que a él le molestaba que su mami no le compre caramelos. Desde ese día deseo que existieran las hadas madrinas para que todos sus compañeros le pidieran deseos y que no pudieran estar nunca mas tristes.¿Y saben qué ? Pedro nunca más se puso triste porque su mamá le preguntaba todos los días, si quería algo del kiosco.

Autora: Tamara

El especial navideño: Noel vs Santa


Hace mucho pero mucho tiempo había un duende llamado Chip, él era muy gruñón y no creía en el espíritu navideño. Un día en el río, mientras se bañaba, pasó una corriente de agua y le cayó algo encima, él no sabía que era, cuando lo vio dijo - ¡es un bebé! Él lo crió, el muchachito creía en la navidad, y fue creciendo hasta que se convirtió en un gran muchachote, siempre ayudaba a todos los niños. Un día decidió hacer una casa y fabricar juguetes para los chiquitos. Él no era Papá Noel, pero se llamaba Noel y regalaba juguetes. Un día Chip le dijo, Santa Claus , o sea Papá Noel, se va a enojar porque le estás robando el trabajo. Noel no le hizo caso y siguió regalando juguetes. Pero, Santa se enojo y buscó un grupo de duendes para destruir a Noel, él ya lo sabía y también se armó de un grupo de duendes. Pelearon contra Santa y ganaron, pero se arrepintieron y juraron no volver a pelear. Así vivieron felices por siempre.

Autores: Sebi y Lucas

Ilustración: Lucas y Dani

Los instrumentos mágicos


Había una vez un castillo gigante y muy lujoso donde vivía una princesa llamada Lani con sus padres y hermanos.
Un día Lani fue a la escuela y estaban organizando un acto musical y les pidieron a todos los chicos que compren Instrumentos baratos. Pero, como la familia era rica y el pueblo de ellos era mágico, compraron Instrumentos mágicos y Lani se los puso en la mochila. Al día siguiente fue al colegio y los puso en una caja pero apareció el malvado brujo llamado Brustis se la llevó a Lani y la caja de los instrumentos, pero en ese momento se les cayeron y el malvado encerró a Lani. Los Instrumentos como sabían donde estaba ella fueron a buscarla, y la encontraron luchando contra Brustis. El malvado murió y la princesa y los instrumentos vivieron felices por siempre.

Autora: Alondra

La bestia vs. el cazador de sueños

Hace mucho pero mucho tiempo había un hombre llamado Pablo que trabajaba en el bosque cortando árboles y quemándolos. Un día Pablo estaba cortando un árbol y ese árbol estaba al lado de un lago, cuando terminó de cortarlo, el árbol se cayó al lago. El quería ganar mucha plata, entonces, entro al lago y lo quemó, al incendiarse el árbol, él se quemó la pierna y se cayó al fondo del lago. Unas sirenas que pasaron por ahí lo llevaron a su cueva y lo curaron. Ellas le preguntaron - ¿cómo nos vas a pagar? él les dijo - les pagaré con mi poder, entonces le absorbieron todo el poder y quedó como una bestia y así lo llamaron en la ciudad “la bestia”. Allí vivía un hombre solitario que resolvía las pesadillas, por eso lo llamaban “el cazador de sueños”. Lo mandaron a rescatar a Pablo, fue un viaje muy largo, al fin lo encontró y le dijo - vamos Pablo, pero la bestia se negó, pelearon y el cazador de sueños le tiró dos flechazos, el primero lo esquivó pero el segundo le dio y lo mató.

Autor: Sebi

Dragones y anacondas


Hace mucho, pero mucho tiempo, vivían unos dragones que eran muy feroces y querían destruir la Tierra. Un día aparecieron unas anacondas gigantes como ellos. y ambos se enfrentaron cara a cara y pelearon. El dragón más fuerte enfrentó a la anaconda más fuerte. Los dragones y las anacondas pelearon porque querían gobernar. Las anacondas agarraron a los dragones y los apretaron con sus colas, los dragones le tiraron una bola gigante y las anacondas apretaron más, pero más fuerte, Los dragones volvieron a tirar una bola más grande que el planeta Plutón, y ellas apretaron con su máximo poder. Los dragones casi mueren. Después de varias horas de lucha, los dragones se quitaron de encima a las anacondas. De pronto apareció la más fuerte de las anacondas y dijo – dejen de pelear y seamos súper amigos. Y así fue, no pelearon nunca más y vivieron felices compartiendo la Tierra.

Autor: Axel
Ilustración: Lucas, Thiago y Dani

Carlos, el cazador de extraterrestres


Había una vez un señor llamado Carlos que era un cazador de extraterrestres. Un día lo llamó su jefe y le dijo que los extraterrestres estaban atacando la ciudad de New York. Él fue con su camioneta Driver y vio a los extraterrestres volando en sus naves. Ellos lo atacaron con sus lacer, pero no le dieron a la camioneta y Carlos disparó con su metralleta, haciendo explotar los ovnis, de ahí cayó un líquido verde.

Autor: Facu